Tips #002: La Manzanilla: la flor suave que transforma tu cabello (y también tu energía)
No sé vos, pero yo crecí escuchando que la manzanilla servía “para todo”. Para calmar el estómago, para dormir mejor, para ponerle a los ojos cansados, y hasta para aclarar el cabello. Y aunque en ese entonces no entendía cómo algo tan suave podía ser tan poderoso… hoy lo confirmo: la manzanilla es una joya de la naturaleza. Y sí, también para el cabello.
Un ingrediente con alma tranquila
La manzanilla es de esas flores que no hacen bulla, pero trabajan profundo. Tiene propiedades antiinflamatorias, calmantes, antioxidantes y regenerativas que hacen maravillas tanto por dentro como por fuera.
En mi rutina capilar, la conocí como ese toque final que no solo le da brillo al pelo, sino que lo calma. Porque, así como hay días en que el cuerpo necesita un descanso, el cabello también lo pide. Y la manzanilla es eso: una pausa natural.
¿Qué hace la manzanilla en el cabello?
Desde mi experiencia, estos son los beneficios que más he sentido y que más me preguntan mis seguidores cuando hablo de este ingrediente:
- Alivia el cuero cabelludo sensible o irritado
- Porta brillo y suavidad natural.
- Ayuda a aclarar el cabello con el tiempo
- Reducir el frizz de forma natural
- Fortalece la hebra capilar gracias a sus antioxidantes.
No es magia, es constancia. Como todo en lo natural.
Mi ritual con manzanilla para el cabello
Yo uso productos que ya la traen en su fórmula (como algunos de mis favoritos de Ayaka), pero también me gusta combinar con rituales caseros. Acá te dejo una rutina que me encanta y que podés hacer en casa:
Ritual capilar con manzanilla (paso a paso)
- Prepare una infusión bien cargada: Use 3 a 4 sobres de manzanilla por taza de agua caliente, déjelos reposar mínimo 10 minutos. Luego colá y deja enfriar completamente.
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Lávate el cabello como de costumbre: Usa tu champú, y si quieres potenciar aún más los efectos aclarantes y suavizantes de esta rutina, te recomiendo el Shampoo Aclarador de Ayaka , que ya contiene extracto natural de manzanilla.
Este paso prepara el cabello para recibir mejores beneficios del enjuague. - Aplicá la infusión como enjuague final: Verté lentamente sobre el cabello limpio o usá un spray para aplicarlo de medios a puntas. Este es el último paso de tu rutina de lavado.
- No enjuagues: Dejá actuar. Si no te sientes cómoda dejándola aplicada, podés enjuagar muy suavemente, pero trata de no retirarla del todo.
- Peiná como de costumbre o dejá secar al natural: Y disfruta de los resultados.
Porque verse bien también es sentirse en paz…
La manzanilla me ha enseñado que no todo cuidado tiene que ser agresivo. Que lo suave también transforma. Que no hace falta hacer mucho ruido para sanar, hidratar o brillar.
Y sí, aunque es una flor chiquita, su energía es enorme y cuando la suma a tu rutina, no solo lo nota tu pelo… lo nota tu vibra.
¿Ya probaste la manzanilla en tu cabello? ¿Te animas a sumarte?
Te leo en los comentarios, hermosa.
¡Con amor, Sofía!
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